OSTEOPATÍA BIODINÁMICA

La biodinámica es la puerta del cuerpo para entrar en un estado de descanso profundo donde la potencia de las fuerzas auto curativas puede actuar de manera adecuada.

La osteopatía por sí misma es una terapia holística, es decir, que actúa sobre el complejo sistema que es el organismos vivo en su conjunto. 

Concibe que cualquier alteración por focal que sea tiene un repercusión general, que puede terminar por ser una afectación general. Esto se debe a los mecanismo de adaptación que se activan en respuesta a una alteración de la homeostasis.

 

¿Cómo es la osteopatía biodinámica?

La osteopatía biodinámica sigue siendo osteopatía, emplea sus mismos principios solo que se centra y profundiza en la relación del individuo con su yo y el todo. De modo y manera que el papel terapéutico se centra en recobrar el pulso vital, los ritmos para armonizar al individuo con el cosmos, por medio de la facilitación de la recuperación del flujo vital y la autosanación.

 

¿Por qué se utiliza la osteopatía biodinámica?

Con la osteopatía biodinámica se pretende un manejo de los flujos de energía y de los pulsos que gobiernan las funciones vitales.

Basada en los principios del Dr. Still, en particular el que hace mención de la capacidad propia del organismo para mantener su homeostasis, es decir, su propia tendencia a la autocuración, comprende la integración del todo en el uno y como la parte condiciona el todo.

 

¿Para qué se utiliza la osteopatía biodinámica?

Esta terapia se emplea para una multitud de procesos, entre ellos podemos nombrar:

Bloqueos articulares.

Alteraciones viscerales y de órganos internos.

Lesiones musculares y desequilibrios osteoarticulares.

Dolores, paresias y algias referidas desde bloqueos del esqueleto axial.

Reequilibrio emocional por causas orgánicas.

Además, podemos mencionar que, por medio de la conversación con el paciente, se pretende hacer ver que el papel que juega en su curación es capital. Para ello es necesaria la adquisición de una conciencia global, en la que no solo se ve la implicación del individuo, sino, también, la influencia el entorno y cómo nos enfrentamos a él.

 

¿Qué debe saber el paciente de la osteopatía biodinámica?

El paciente debe entender el papel autocurativo de su cuerpo. El terapeuta favorece que se alcance dicho estado, por medio de la osteopatía biodinámica, restableciendo el correcto flujo, por medio de:

Control de la respiración

Manejo del LCR

Correcciones articulares o viscerales pertinentes

Aunque en la mayoría de los casos el terapeuta debe ser solo un medio canalizador y nada más.

La colaboración de paciente es fundamental ya que se debe hacer consciente el estado que se alcanza, para saber cuando empieza a desequilibrarse de nuevo e intentar corregirlo por medio del empleo de diversas técnicas que se le pueden enseñar.

La osteopatía biodinámica, una osteopatía bioenergética

Esta técnica sigue siendo eminentemente física, tanto en cuanto se emplean las manos para llevarla a cabo, pero estas solo son el instrumento, el medio con el que se entra en contacto con los fenómenos más sutiles del ser. 

La intención es la recuperación de las mareas, pulsos, resonancias, que rigen al organismo en su estado de equilibrio, por medio de la liberación de las interferencias que se van adquiriendo a lo largo de nuestro desarrollo.

¿Cómo funciona la osteopatía biodinámica?

Con el incremento de los conocimientos y los avances tecnológicos, ciertos aspectos que en el pasado solo eran especulaciones y percepciones no tangibles, en la actualidad pueden demostrarse algunas de ellas:

La emisión de infrarrojos

Los campos electromagnéticos que se generan en nuestro interior

Los gradientes electroquímicos

El efecto de la radiación cósmica

Las ondas cerebrales

 

Son fuentes de energía que está modulada tanto por factores internos como externos. Estas emisiones pueden medirse y traducirse en un estado general que afecta a todos los aspectos del individuo.

Es por esto que el concepto de liberación por parte la osteopatía biodinámica y la recuperación de los pulsos induce al individuo a un estado basal, en el que se reordenan las funciones basales, de forma que se reprograma de nuevo al organismo.

Además, por medio de la experiencia subjetiva del paciente, este es capaz de percibir su estado original, que en muchas ocasiones puede verse alterado desde periodos tan tempranos como en el vientre materno.

El mantenimiento de las constantes de la salud es una difícil tarea, pero cada vez son más los hechos que apuntan a la capacidad del organismo para la autosanación.